Descanso.
Así es como me he tomado la
Semana Santa sevillana este año. Los dos últimos años, con motivo de que mi
familia canaria ha estado viniendo a Sevilla en estas fechas a ver de cerca las
procesiones, he vivido la Semana Santa de una forma bastante activa. He
esperado a pie quieto a que centenares de nazarenos pasasen delante de mí en
fila rigurosa, me he metido en multitudes ( aquí rebujones ) de gente no aptos para los más ansiosos, he andado y
andado… Y lo he pasado bien, lo digo en serio. Porque en estos dos años he
descubierto que, en lo que a Semana Santa sevillana se refiere, aún sigo siendo
un poco forastera. Y que en el fondo eso me mola.
Yo ya pierdo la cabeza con
bastantes otras cosas que me gustan a rabiar, así que de vez en cuando es todo
un lujo pasarte al otro lado. Elegir hacer o no hacer. Y de vez en cuando, hay
que dejar ganar al no hacer nada, porque descubres cosas nueva de ti mismo.
Pero para que veáis que pienso en
tod@s, os tenía este post y esta recomendación reservada para hoy Jueves de
Semana Santa, porque el nombre no nos puede venir mejor para la ocasión. Es
mano de santo.
Sea lo que sea que estéis
haciendo por Sevilla en estos días, daros una vuelta por la Alameda de
Hércules. Una zona casi peatonal en el centro de Sevilla y de fácil acceso a
pie. Un espacio abierto que seguro vais agradecer después de horas y horas
nadando en mares de gente. Y como recompensa encontrareis este pequeño gastro-bar
mexicano llamado Mano de Santo que poco tiene que ver con el resto de comida
mexicana que encontraréis por Sevilla.
Hace unos cuatro años, coincidí
en mi anterior trabajo con con dos alumnos en prácticas que habían venido a
Sevilla a hacer su Erasmus, Toño y Raquel. Y me encantaba charlar con ellos
acerca de todo lo referente al choque cultural México-España, y me contaban
ellos cuánto echaban de menos la comida tipíca de su país, tan especiada, sabrosa
y picante…tanto que al lado de áquella, la nuestra prácticamente no tenía sabor
para ellos! Mis queridos Toño y Raquel, tengo que deciros que he comprobado en
primera persona en Mano de Santo a qué os referíais!
M y yo vimos que la carta tenía
una variedad inmensa de tacos y otros platillos ricos típicos del país de los
aztecas. Y de cocktails!
Y la carta está pensada para ir
probando varios de ellos, yo os recomiendo que empecéis por el menos picante y
vayáis en aumento, ¡por aquello de no matar sabores!
Ensenada
Con dos gambones en tempura, con
verdurita picadita y aguacate. Y ya sabéis que cuando veo aguacates ya no puedo
pensar en nada más! Muy suave e ideal para comenzar.
Tinga de pollo
Pollo desmenuzado, salteado con
verduras, chipotle y verduras. Sabroso e intenso!
Tinga de setas
Variedad de setas salteadas con
chipotle. Picante para valientes!
Y para finalizar, quesadillas de Huitlacoche
Hongo de maíz con queso, lo más
picante que probé esa noche y que he probado en toda mi vida!
Pero mi filosofía ya la conocéis,
dentro de los gustos de cada uno hay que estar abiertos a nuevas experiencias,
a pasarse al otro lado de vez en cuando, a no hacer nada o a hacerlo todo.
Hagáis lo que hagáis, estéis
donde estéis, os deseo a tod@s que disfrutéis de la Semana Santa.
Mano De Santo
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