Creo que voy
necesitando un poquito de bajas temperaturas ya. Qué loca soy, ¿verdad? En
Sevilla aún andamos de veranillo eterno y mangas cortas, y esta chica en el
sur, nacida para más señas en climas paradisiacos y tropicales, se muere por
usar una bufanda de lana virgen ya. Aunque tengo un buen argumento: en mi
defensa diré que se trata de una bufanda nueva y muy suave que compré este
verano durante los días que pasé en Nueva York, bajo la atenta mirada de unos
95 grados Fahrenheit con humedad, situación que sólo hacía presagiar este
verano infinito en el que se ha convertido mi vida.
Mientras mi querida
Kylie Minogue daba el pistoletazo de salida al encendido navideño en plena
calle Oxford, en el Londres de mis amores, yo seguía vistiendome con mi ropa veraniega
y pasaba bastante calor en el centro de Sevilla.Pero como me digo siempre que
no puedo andar por ahí ofuscándome por lo que todavía no puedo tener, a grandes
males hay que buscarles grandes remedios. Calor? Salmorejo!
Y en El Pintón, a
donde si no habéis ido todavía ya deberíais
buscar un hueco para hacerlo, sirven un salmorejo espectacular. Y otras
cositas que os encantará comeros.
M y yo estuvimos
tapeando en este patio sevillano deluxe, azulejeado con colores y motivos
típicos con mayúsculas que está situado en el centro justo al lado de las
famosas galerías Peiré, de hecho ocupa parte del espacio de las mismas.
Dentro todo son
mezclas. De luces naturales con artificiales. De muebles tradicionales con
otros más innovadores. De colores pasteles con las diferentes maderas. Y
coronándolo todo, un bonito olivo en mitad de este patio.
M y yo comenzamos
con unas croquetas caseras
Buenísimas, con una
curiosa salsa dulce adornándolas.
Para mí, mi
salmorejo con la receta especial de la semana:
Con caballas y un
poquitín de cebolla. Voy a adorar a El Pintón a partir de ahora, porque
efectivamente no sólo de jamón serrano se vive. La combinación de las caballas
con el salmorejo es de lo más original y sabroso.
Para M, Yaki Udon.
Con presa, verduritas y yakisoba. Estaba muy rico también!
Lo probé. Lo
confieso: yo soy una de esas chicas que cuando están a la mesa miran con una
sonrisa a su acompañante mientras se le acercan con un tenedor... Y como en la
vida, solamente es cuestión de encontrar al acompañante y combinación adecuada.
Disfrutemos de lo
que tenemos, ya llegarán tiempos más frescos.
Calle Francos, 42, 41004 Sevilla
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