Una chica en el sur: Smoothies para merendar: Milk Away

Tengo que acabar admitiendo que, tras mi paso por el taller de comida sana que organizaron #Estraperlosevilla y Lola #Desenvuelta, estoy viendo la comida en general con otros ojos, me están empezando a interesar otras comidas diferentes, estoy haciendo modificaciones sanas en mis hábitos alimentarios diarios, tanto en la comida que preparo yo como en la que consumo fuera de casa y preparada por otros, e incluso he notado que tardo más tiempo en el supermercado los Viernes por la tarde a la hora de hacer la compra semanal, porque ¡oh! acabo leyendo las etiquetas de todo lo que compro y que está envasado y/o procesado.

No me he vuelto vegana, ni crudivegana, ni vegetariana, ni nada, ni creo que lo haga: sigo comiendo carne, aunque desde hace un tiempo ya había reducido mi consumo a una ración de carne a la semana. Como dos de pescado y una de mariscos o moluscos. Dos raciones semanales también de legumbres, y el resto es fruta, verdura, avena y otros cereales integrales. La leche, queso, yogures y huevos, amigos con derecho a roce. Y el pan, azúcar y pastelitos, aventurillas pasajeras. Las prohibiciones nunca han funcionado bien conmigo. Reconozco que estoy muy viciada por mi formación en Psicología y que la acabo aplicando en muchas áreas de mi vida, y para conseguir el verdadero equilibrio mente-cuerpo que estoy buscando, casi todo tiene que estar presente en mayor o menor medida.

Y en consonancia con todo esto, y buscando nuevos sitios para merendar, me tropecé en todo el centro de Sevilla con Milk Away.

Una pequeña y azulejeada cafetería sana, donde la simpática Martina prepara batidos de frutas ( los archiconocidos smoothies ) a la carta según los gustos de cada uno, aunque también te da algunas ideas ricas de frutas y especies para mezclar, para los que nos iniciamos en esto.

También se pueden tomar zumos de naranja cien por cien natural y recién exprimidas, o deliciosas ensaladas a mediodía.

¿Os acordáis de Silvia, que también estuvo conmigo en el taller de cocina sana de Estraperlo&Desenvuelta?

Nos caímos genial nada más conocernos en el taller, y como descubrimos que compartimos ese interés mutuo por la comida sana, decidimos volver a vernos y venir a merendar rico a Milk Away.

Yo pedí para tomar un Get Orangey: Plátano, zanahorias, naranja y un toque de jengibre

Los cítricos me encantan, me resultó una bebida super fresca, y descubrí que el jengibre activa cual cafeína, ¡pero con una sensación menos artifical!

Silvia pidió algo completamente diferente:

Remolacha y piña, a lo el jing y el jang!!

Lo probé, era fuerte y fresco a la vez. ¡Contrastes!

Al final vas comprendiendo que esto de la vida sana no se trata de convertirte en una persona diferente de un día para otro y acabar siendo lo opuesto a lo que eras. Es más bien como un cubo de rubik, tienes un objetivo al que quieres llegar y das vueltas y vueltas, hasta que empiezas a hacer movimientos nuevos y todo empieza a ir encajando, todo se equilibra, todo deja de ser desordenado.